El eurodiputado de IU, Willy Meyer, ha presentado esta mañana una pregunta ante la Comisión Europea, exigiendo la prohibición del uso del amianto en la Unión Europea."El Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de Naciones Unidas, artículo 12, reconoce que todas las personas tienen el derecho a disfrutar de su salud física y mental. El derecho a la salud obliga a los Estados a generar condiciones en las cuales todos puedan vivir saludablemente.
En Europa y a nivel mundial, millones de trabajadores y consumidores se encuentran expuestos al amianto. Las enfermedades causadas por las fibras de amianto se encuentran entre las enfermedades profesionales más graves. Anualmente, fallecen hasta 100.000 personas por enfermedades relacionadas con el amianto en todo el mundo, más del 54% de las muertes ocasionadas por cánceres profesionales.
La Directiva 1999/77/CE por la que se adapta al progreso técnico por sexta vez el anexo I de la Directiva 76/769/CEE relativa a la aproximación de las disposiciones legales, reglamentarias y administrativas de los Estados miembros que limitan la comercialización y el uso de determinadas sustancias y preparados peligrosos supuso la prohibición el amianto en todo el territorio de la UE antes de enero de 2005, y ampliando el plazo para el amianto utilizado en las instalaciones de electrolisis hasta enero de 2008. Sin embargo, en estos momentos la Comisión europea a través de la directiva REACH, se plantea prorrogar la derogación de la utilización de diafragmas que contienen células de electrolisis en base a amianto crisotilo.
Puesto que no encontramos ningún motivo que justifique esta decisión, más allá que el haber cedido a las presiones del lobby formado por empresas la empresas interesadas, tal y como vienen denunciando sindicatos y asociaciones médicas y de afectados, anteponiendo por tanto criterios económicos a los criterios científicos y al derecho inalienable a la salud y a la protección de los trabajadores en los lugares de trabajo.
- ¿Tiene la Comisión algún nuevo dato científico que avale la decisión de prorrogar la utilización del amianto?
- ¿Cree la Comisión que es compatible la manipulación de esta sustancia, tóxica y cancerígena, responsable de la muerte de una centena de miles de trabajadores cada año, con la normativa europea sobre salud e higiene en los centros de trabajo?
- ¿No cree la Comisión que su función, como institución comprometida con la defensa de los derechos humanos, debería ser promover la prohibición total de amianto a nivel mundial?"
En Europa y a nivel mundial, millones de trabajadores y consumidores se encuentran expuestos al amianto. Las enfermedades causadas por las fibras de amianto se encuentran entre las enfermedades profesionales más graves. Anualmente, fallecen hasta 100.000 personas por enfermedades relacionadas con el amianto en todo el mundo, más del 54% de las muertes ocasionadas por cánceres profesionales.
La Directiva 1999/77/CE por la que se adapta al progreso técnico por sexta vez el anexo I de la Directiva 76/769/CEE relativa a la aproximación de las disposiciones legales, reglamentarias y administrativas de los Estados miembros que limitan la comercialización y el uso de determinadas sustancias y preparados peligrosos supuso la prohibición el amianto en todo el territorio de la UE antes de enero de 2005, y ampliando el plazo para el amianto utilizado en las instalaciones de electrolisis hasta enero de 2008. Sin embargo, en estos momentos la Comisión europea a través de la directiva REACH, se plantea prorrogar la derogación de la utilización de diafragmas que contienen células de electrolisis en base a amianto crisotilo.
Puesto que no encontramos ningún motivo que justifique esta decisión, más allá que el haber cedido a las presiones del lobby formado por empresas la empresas interesadas, tal y como vienen denunciando sindicatos y asociaciones médicas y de afectados, anteponiendo por tanto criterios económicos a los criterios científicos y al derecho inalienable a la salud y a la protección de los trabajadores en los lugares de trabajo.
- ¿Tiene la Comisión algún nuevo dato científico que avale la decisión de prorrogar la utilización del amianto?
- ¿Cree la Comisión que es compatible la manipulación de esta sustancia, tóxica y cancerígena, responsable de la muerte de una centena de miles de trabajadores cada año, con la normativa europea sobre salud e higiene en los centros de trabajo?
- ¿No cree la Comisión que su función, como institución comprometida con la defensa de los derechos humanos, debería ser promover la prohibición total de amianto a nivel mundial?"
