Willy MEYER y Giusto CATANIA en nombre del Grupo de la Izquierda Unitaria Europea / Izquierda verde Nórdica del Parlamento Europeo.
Con una resolución de derechos humanos sobre Venezuela, la derecha del Parlamento ridiculiza, y desacredita el mecanismo de defensa de los derechos humanos del Parlamento Europeo.
Después de diversos intentos fracasados, de la derecha del Parlamento Europeo, -la misma que recientemente votó la "Directiva del retorno"-, logró finalmente inscribir Venezuela en el tema de urgencias sobre derechos humanos, ante la insistencia de representantes de la oposición de Venezuela que viajaron especialmente y repetidamente a Europa con ese fin.
Con esta resolución, la derecha del Parlamento europeo se convierte en el aliado objetivo de los corruptos en Venezuela, -sean próximos de la oposición o del Gobierno de Venezuela-, porque ataca el sistema de la "inhabilitaciones", que obliga por ley al Contralor General de la República a impedir que funcionarios públicos que han realizado malversaciones comprobadas se presenten como candidatos a elecciones por un tiempo determinado. El sistema de las "inhabilitaciones" de Venezuela es un sistema similar al que opera en varios países europeos, por el cual el Contralor General de Venezuela de manera prudente y en respeto del debido proceso, aplica una legislación anterior al actual Gobierno, que ha sido aprobada por la Asamblea Nacional de Venezuela incluyendo la oposición, y que ha sido refrendada por la Tribunal Supremo de Justicia en más de cuatro sentencias.
Llama la atención el hecho que la derecha haya insistido en poner este tema al orden del día, negándose rotundamente a que el Parlamento Europeo considere temas de derechos humanos urgentes y graves, como la represión y el brutal asesinato de decenas de indígenas y sindicalistas en Colombia, o el fallido intento de golpe de estado contra el Presidente Evo Morales por las ultra-derechistas brigadas cruzeñistas de Bolivia.
Ante esta desviación del mecanismo de derechos humanos con fines partidistas, tres grupos parlamentarios que suman 301 diputados europeos, el grupo de Izquierda Unitaria Europea (GUE/NGL), y el Grupo de los Verdes (GREENS-EFA), y el grupo socialista (PSE) decidieron no participar en el voto de esta resolución (voto previsto para este jueves 23 de Octubre), porque consideran que desacredita gravemente el mecanismo de defensa de los derechos humanos del Parlamento Europeo, y lo desvía para atacar sin fundamento a un gobierno progresista de América latina.
